Con la situación que estamos viviendo, muchas nos hemos quedado en casa sin la posibilidad de retirar las uñas de gel en nuestro centro de estética. Aunque intentemos aguantarlas lo máximo posible, en algún momento del confinamiento tendremos que quitar el gel. Cuando ese momento llegue, hay que hacerlo de manera cuidadosa y siguiente los pasos que os mostraremos a continuación.

Sigue estos pasos y resiste la tentación de rascar o morder el esmalte, ya que al quitar el esmalte de esta manera, te quitas también la capa ungueal por lo que debilitas mucho la uña y la haces susceptible de pelarse y romperse. Con estos pasos, podrás retirar la manicura en gel en casa y sin dañarte las uñas. ¿El ingrediente principal que necesitarás? Paciencia.
1. Ves a un espacio ventilado para retirar las uñas de gel en casa
Busca un sitio tranquilo para retirar las uñas de gel en casa, y lo más importante, es que sea una zona ventilada o cercana a una ventana para que no respires mucho la acetona. Necesitará unos 30 minutos que puedes aprovechar para ver un capítulo de Netflix.
2. Desenfunda la lima

Antes de usar el quitaesmalte, toma una lima de uñas gruesa y lija suave y lentamente la capa superior de esmalte. La clave aquí es no lijar todo el esmalte. El objetivo es tan sólo desgastar al capa superior, solo eliminando el brillo, pero no el color del gel.
3. Protege tu piel
Cubre la piel que rodea las uñas y las yemas de los dedos con un aceite para cutículas o una crema hidratante espesa. Esto nos protegerá de la acetona, que es muy seca para la piel.
4. Empapar trozos de algodón
La clave para retirar las uñas de gel en casa, es empapar las uñas en acetona. Coge unos recuadros o trozos de algodón, déjalos remojando en mucha acetona. Cuando estén empapados coloca un trozo en cada uña cubriéndola bien.
5. Envuelva los dedos con papel de aluminio

Recorta cuadrados de papel de aluminio (puedes hacerlo antes de empezar). Luego envuelve todos los dedos con el trozo de algodón, con el cuadrado de papel de aluminio. Empezamos por la mano izquierda, y luego la derecha, pues nos será más fácil la colocación. Después de 10 o 15 minutos, comprueba cómo está el esmalte de una uña.
El esmalte de gel tiene que tener la apariencia en este caso de como si se levantara o fuera a caer de la uña, por lo que lo que queda de esmalte puede eliminarse con un poco de presión. Si no es así, vuelve a remojar en acetona, y envuelve en papel de aluminio durante otros 5 minutos. Vuelve a intentar hasta que todas las uñas estén listas.
Una vez que se haya aflojado todo el esmalte de uñas en gel, retire la lámina de cada dedo y aplique una ligera presión sobre la uña con la bola de algodón. Para las manchas restantes, use suavemente un palito de naranjo para uñas para levantar los restos.
Consejo profesional: «Las herramientas de madera pueden ser un caldo de cultivo para las bacterias, así que deséchelas después de cada uso y no las compartas.
6. Hidrata, Hidrata, Hidrata

Después de una larga aventura con la acetona, es probable que las uñas estén un poco secas. Dales un respiro y remójalas en aceite de coco durante cinco o siete minutos. Luego aplica un aceite de cutícula para rejuvenecerlas y re-hidratarlas. Sigue con una base fortalecedora si tienes, y acaba con una crema de manos con manteca de karité para sellar la hidratación en toda la mano.
¿Qué tal os ha ido? ¿Habéis encontrado dificiles los pasos?